Práctica 5. Educación en 2040. Laura Martínez Moreno

Son las 7:30 de una mañana soleada de mayo de 2040. Me levanto con una sensación de añoranza. Mientras desayuno voy recordando que he soñado con la universidad, pero no una universidad cualquiera, sino la Universidad de Alicante donde me gradué. Ahora puedo decir que he cumplido mi sueño, llevo 10 años trabajando como maestra en un colegio muy cercano a mi casa. A la vez que me tomo mi zumo de naranja para llenarme de energía, pienso en cómo ha cambiado la educación 20 años después.

El colegio en el que imparto clases y el resto de colegios de mi ciudad son tan diferentes a los de 20 años atrás. Ahora todos disponen de ventanales enormes, y gracias al buen tiempo de la ciudad, todos los días la clase se llena de luz, de vida. La tecnología ha ocupado un gran lugar. Los libros físicos han desaparecido y todos los niños/as disponen de un dispositivo electrónico. Se dijo adiós a las pizarras, a las tizas y a los borradores. Aún recuerdo la tiricia que me daba el ruido de la tiza contra la pizarra. También utilizamos mucho la impresión 3D en los trabajos de los alumnos/as. ¡Les encanta!

En mi colegio todos mis alumnos/as son presenciales, pero ahora se puede elegir la modalidad de educación (presencial u online). De esta forma, el acceso a la educación es mucho más fácil y todos los niños/as tienen derecho a ella. La disponibilidad de las conexiones a Internet cubre todos los territorios, incluso en zonas rurales.

Y qué decir de los idiomas. Ahora todos los colegios sin bilingües, con la mitad de asignaturas en inglés y la otra mitad en castellano. Recuerdo esos años cuando yo iba al colegio y nadie de mi clase sabía hablar inglés, a excepción de 2 o 3 compañeros/as que iban a academia. En cambio ahora, todos los niños/as de mi clase lo hablan con soltura, como si de su lengua materna se tratase. Siempre me quedo fascinada al oírlos.

Ha cambiado tanto el sistema educativo en solo 20 años. La verdad es que en ocasiones echo de menos el sistema tradicional, los libros, folios, lápices, reglas…pero por otra parte estoy contenta de que la educación ha cambiado a mejor y lo seguirá haciendo, estoy segura. Y ahora yo me pregunto…¿Cómo será dentro de otros 20 años?